INSTRUCCIONES PARA VIVIR
Recuerdo que antes de nacer estaba yo preocupado porque no conocía el mundo al que llegaría. Entonces le pedí a Dos instrucciones para vivir en esta tierra. Dios acercó su voz a mi oído y dijo:
Sé como el sol:
Levántate temprano y no te acuestas tarde.
Sé como la luna:
Brilla en la oscuridad, pero sométete a la luz mayor.
Sé como los pájaros:
Come, canta y vuela.
Sé como las flores:
Enamoradas del sol, pero fieles a sus raíces.
Sé como el buen perro:
Obediente, pero nada más que a su Señor.
Sé como la fruta:
Bella por fuera, saludable por dentro.
Sé como el día:
Que llega sin alardes y se retira humildemente.
Sé como los recién nacidos:
Sin temor a la muerte.
Sé como el oasis:
Da tu agua al sediento.
Sé como el río:
Siempre hacia delante.
Sé como la luciérnaga:
Aunque pequeño bicho, emite su propia luz.
Sé como los niños:
Juega, ríe, y no te preocupes por la vejez.
Sé como el agua:
Buena y transparente.
Sé como los toros de lidia:
Lucha por tu vida hasta el final.
Sé como José:
Cree en tus sueños.
Sé como Lázaro:
Levántate y anda.
Y sobre todas las cosas, sé como el cielo:
La morada de Dios.
Sigue...